El sadomasoquismo es una práctica en donde existe un intercambio consensual de poderes. Contrario a lo que todo el mundo piensa, los juegos de ataduras, dominación y sadomasoquismo (BDSM) no tienen nada que ver con la humillación sexual, ni con la coerción, sino que están relacionado directamente con la erotización que producen los juegos de poder.
Existen muchos prejuicios alrededor de estas prácticas, principalmente por la falta de información, pues basta con ver como es definido el término "sadomasoquismo" en cualquier diccionario: "conducta o comportamiento sexual en el que la persona experimenta excitación y satisfacción mediante el sufrimiento físico o psíquico que inflige a otra persona o que recibe de ella", por su parte, la Real Academia Española lo conceptualiza como: "una perversión sexual de quien goza con verse humillado o maltratado por otra persona".
Actualmente, con la moda existente con la novela y posterior película "Cincuenta Sombras de Grey", se ha cambiado un poco la percepción alrededor del sadomasoquismo, inclusive se despertó la curiosidad de muchos, por lo que ahora se está viendo con otros ojos. Aunque la historia alimenta algunos mitos que son totalmente falsos, como que aquellos que practican la dominación y este tipo de practicas han sufrido de abusos o son personas que rehuyen de las relaciones de pareja y del romanticismo. No solo no han sufrido ningún tipo de abuso, sino que en su mayoría, las parejas que desarrollan este tipo de experiencias son parejas consolidadas que buscan condimentar intensamente la actividad sexual. Estos juegos de dominancia y sumisión requieren de intimidad emocional y mucha confianza para llevarlos a cabo, es por eso que no son recomendables con parejas casuales.
Al igual como sucede con los juegos donde asumimos roles y actuamos, en el sexo sadomasoquista también existe una fuerte conexión con las fantasías, éstas en las que se asume un rol sumiso, como cuando alguien te toma a la fuerza, te secuestra o te seduce, o aquellas otras en las que te encuentras en total y absoluto control erótico de una situación, como por ejemplo: tener esclavos sexuales o soñar que un famoso muere de pasión por ti. El juego de poderes es muy importante para la imaginación erótica y su práctica es infinitamente deliciosa.
Un factor que causa mucha intriga al hablar del tema del sadomasoquismo, es el dolor, pero es relevante que se conozca que el sexo sadomasoquista no se debe fundamentalmente a la experiencia física del dolor, aunque algunas actividades típicas si se condimentan con él. Lo mejor para describir la experiencia de este tipo de prácticas es que se generan sensaciones súper intensas, en lugar de decir que causan dolor.
La expresión sexual sadomasoquista es muy compleja y variada, pero es una alternativa real y vigente para quienes se interesan en ella, no hay que temerle, ni ser prejuiciosas con quienes eligen disfrutar de estos juegos eróticos.
Por tanto, si sienten ganas de adentrarse en el mundo de los juegos sadomasoquistas, es importante que tomen en cuenta algunas recomendaciones: primero deben comenzar con algo bien sencillo, como la privación sensorial (no ver, ni oír, esto aumenta las sensaciones corporales), para eso cubre tus ojos con una venda y colocate unos auriculares con la música de tu agrado, mientras tu pareja recorre tu cuerpo con caricias y te conduce al orgasmo. También puede jugar con algunos amarres, la sensación de no poder liberarte es un gran estímulo, por eso elige un par de esposas, un cinturón, una corbata o cualquier amarre que los haga sentir cómodos. Otra opción muy caliente son los azotes con la mano y en los gluteos, mejor conocidas como nalgadas, la intensidad y la cantidad dependerá de la pareja.
Es por eso, que en esta práctica debe existir comunicación honesta y fluída, mas aún, hasta deben utilizarse palabras claves para dar a conocer cuándo es suficiente o cuando se quiere más, para que así todo resulte placentero. Recuerden siempre que es un juego y un juego es para pasarla bien, disfrutar, salir de la rutina, por tanto, redescubre esa pasión por jugar y verás cómo se fortalece tu intimidad y tu relación de pareja.
Atrevete!.
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